Así de bonito, cercado y ridiculizado queda un árbol por intentar alojar o ceder educadamente espacio a la tribuna que se levanta una semana al año en nuestra ciudad. Bueno, en esta serie iniciada nadie dijo que no habría capítulos con toques surrealistas en el guión. En descargo de la administración pública municipal que perpetra esta tropelía para ganar cuatro asientos por fila, hay que decir que lo hacen por el interés de los ciudadanos, que para ellos es mandato. Vamos, que la culpa la tenemos todos, los que lo hacen y los que lo permitimos. Para la foto de la tribuna esperen al próximo capitulo.
Y para los que no son de Málaga, aclaro que la foto está hecha durante la Semana Santa, en la tribuna principal de nuestra ciudad, donde se ubican las autoridades para ver procesionar los tronos. los árboles y la tribuna cohabitan en el mismo espacio con gran normalidad.
Esta foto, no puede pasar sin un comentario. Me niego a que suba a la derecha del blog y quede en los artículos del mes de febrero.
ResponderEliminarEsto, bien podría ser la otra cara de la Semana Santa, por eso siempre será interesante buscar el equilibrio entre todas las cosas. Por un lado seguir satisfaciendo la representación de la vida, muerte y resurección de cristo y por otro que en los arboles no sea una semana más incómoda, que bastante castigo tiene ya el señor arbol, con estar plantado en un perfecto ensolado, con poca tierra y pocos compañeros.
Viva el blog.